Cosas emocionantes para hacer en Santo Domingo

El Alcázar de Colón es la residencia real más antigua de las Américas, con su interior y muebles auténticos. Fue construido por órdenes de Diego Colón (hijo de Cristóbal) como una casa que compartió con su esposa María de Toledo a principios del siglo XVI. Es un edificio de dos pisos: un lado orientado hacia el río Ozama y el otro hacia la Plaza España.

Uno de los mayores monumentos del mundo, donde, según la República Dominicana, descansan los restos de Cristóbal Colón. El faro se enciende solo en días festivos importantes, y su luz es visible a kilómetros de distancia, brillando en el cielo con forma de cruz. El monumento fue consagrado por el Papa Juan Pablo II en 1992. Su "papamóvil" todavía se encuentra cerca.

El Teleférico (teleférico) en SD no fue construido para los turistas, sino como un servicio de transporte público para aquellos que viven en los barrios (vecindarios pobres). Esta es una forma totalmente segura de observar los barrios desde arriba. Verás cómo vive la gente, sus escuelas, pequeñas iglesias, colmados (tiendas locales), calles estrechas, ríos y puentes. El Teleférico es limpio y muy barato (menos de un dólar por un viaje redondo). Es la mejor manera de ver el otro rostro de una de las capitales más contrastantes del mundo.

La primera taberna del Nuevo Mundo también se encuentra aquí. Abierta desde 1505, este lugar mantiene el espíritu de los buenos tiempos, donde los piratas del Caribe podían tomar un trago de ron. Hoy en día, puedes almorzar o simplemente tomar una taza de café con una agradable vista de la Plaza España y el Alcázar de Colón.